En el Coliseo de Hong Kong, Mo Lee Kai-yin, de 27 años, fue golpeado en la cabeza por una pantalla gigante de 5 por 3 metros que se estrelló contra su cuello. Otro bailarín, Chang Tsz-fung, de 29 años, también resultó herido en el incidente.

El concierto se detuvo y ambos bailarines fueron trasladados de inmediato al Hospital Queen Elizabeth.

Tres mujeres que asistieron al concierto, de 16, 21 y 40 años, fueron tratadas por shock mientras que una fue enviada al hospital.

«A Mo se le dislocó la tercera y cuarta sección de sus vértebras cervicales, dejándolo incapaz de moverse».

Después de un procedimiento nocturno y otra cirugía de ocho horas, los médicos pudieron estabilizar al bailarín. La posible parálisis del cuello para abajo dependerá de su proceso de recuperación y de si sus nervios dañados vuelven a crecer.

Los miembros de la familia de Mo han llegado de Canadá y la Oficina de Salud ha hecho arreglos para que hagan una visita al hospital.

Las autoridades investigaron de inmediato el accidente y descubrieron que uno de los dos cables metálicos que sostenían la pantalla se había roto durante el concierto. Actualmente se está llevando a cabo una investigación mientras los expertos intentan averiguar qué causó exactamente que fallaran los cables de suspensión. Los diversos contratistas del concierto, incluidos Engineering Impact y Hip Hing Loong, participarán en la investigación con las autoridades.

Los oficiales del Departamento de Trabajo ya han recolectado evidencia del lugar y todos los demás eventos en el lugar han sido suspendidos.