Cientos de panameños salieron hoy a las calles y bloquearon carreteras para protestar en contra de los esfuerzos del presidente Laurentino Cortizo para hacer frente a un encarecimiento del costo de la vida luego de la pandemia que frenó la actividad económica del país.

En varios puntos de la nación centroamericana los manifestantes tomaron las calles y bloquearon importantes vialidades impidiendo el paso de camiones con alimentos a diferentes regiones, una medida de presión que ha ido en aumento desde que iniciaron las protestas hace dos semanas.

«La situación es crítica», dijo Humberto Montero, integrante de la Asociación de Educadores Veragüenses, que ha buscado, junto con otras organizaciones, presentar una propuesta que permita llegar a un acuerdo con el Gobierno.

La escalada de los precios también por los efectos en las cadenas productivas globales de la guerra en Ucrania detonó las movilizaciones a principios de julio, pero los inconformes exigen ahora además un mayor control del gasto público, frenar la corrupción y nuevas inversiones en el sector salud.

Desde el inicio de las protestas el gobierno de Cortizo, que se vio obligado a tomar medidas de austeridad y congelar los precios de la gasolina y el diésel, ha intentado llegar a un acuerdo con los manifestantes sin lograrlo.

La policía panameña lanzó en la víspera gas lacrimógeno en contra de un grupo que mantenía cerrada una vialidad al oeste del país, buscando contener la movilización. «Si la policía continúa con la represión se afectará el diálogo», agregó Montero en una entrevista con Reuters.

El sector productivo pidió a los manifestantes permitirles establecer «corredores humanitarios» para garantizar la distribución de alimentos mientras llegan a un acuerdo con autoridades. El gremio asegura que registran desabasto y pérdidas millonarias aún sin cuantificar.

El Ministerio de Desarrollo Agropecuario no respondió de inmediato a una consulta de Reuters sobre el posible impacto de las protestas.

Información: Reuters