Un grupo bipartidista de senadores estadounidenses, entre los que se encuentran suficientes republicanos para superar la regla del «filibusterismo» de la cámara, anunció el domingo un acuerdo sobre un marco para una posible legislación sobre seguridad de las armas.
El proyecto incluye el apoyo a las leyes estatales de «bandera roja», el endurecimiento del control de antecedentes para los compradores de armas de fuego menores de 21 años y el combate de las «compras nominativas», pero no otros límites que los demócratas y el presidente Joe Biden habían defendido, como el aumento de la edad para comprar rifles semiautomáticos a 21 años o nuevos límites para los rifles de asalto.
Diez republicanos mostraron su apoyo al acuerdo preliminar, lo que indica que la medida podría avanzar hasta una votación de aprobación y superar los obstáculos de otros republicanos que se oponen a la mayoría de las medidas de control de armas.
Las conversaciones que condujeron a este marco se produjeron tras una serie de matanzas de gran repercusión en Estados Unidos, como el ocurrido en una escuela de Uvalde (Texas) el mes pasado, en el que murieron 19 niños, y el ocurrido también en mayo en un supermercado de Búfalo (Nueva York), en el que murieron 10 personas negras.
El líder de la mayoría del Senado, el demócrata Chuck Schumer, emitió un comunicado en el que calificó el plan como «un buen primer paso» y que «limitaría la capacidad de los potenciales asesinos de masas para obtener rápidamente rifles de asalto mediante el establecimiento de un proceso mejorado de verificación de antecedentes para los compradores de armas menores de 21 años».
Schumer dijo que quiere trasladar un proyecto de ley rápidamente a una votación en el Senado una vez que los detalles legislativos estén resueltos.
Estados Unidos tiene el mayor índice de muertes por armas de fuego entre las naciones ricas del mundo. Sin embargo, es un país en el que muchos aprecian el derecho a las armas y la Segunda Enmienda de su Constitución protege el derecho a «tener y portar armas».
«Nuestro plan salva vidas a la vez que protege los derechos constitucionales de los estadounidenses que respetan la ley», dijo el grupo, liderado por el demócrata Chris Murphy y el republicano John Cornyn, en un comunicado. «Esperamos conseguir un amplio apoyo bipartidista y aprobar nuestra propuesta de sentido común como ley».
Con información de Reuters