El candidato presidencial de izquierda colombiano Gustavo Petro de la coalición Pacto Histórico y la candidata a la vicepresidencia Francia Márquez reaccionan en el escenario después de que Petro ganó la primera ronda de las elecciones presidenciales en Bogotá, Colombia. FOTO: REUTERS/Santiago Arcos

El izquierdista Gustavo Petro y el empresario Rodolfo Hernández irán a un balotaje el 19 de junio para decidir quién será el próximo presidente de Colombia, después de que ninguno logró el domingo los votos necesarios para consagrarse en primera ronda.

Con el escrutinio del 94,19% de las mesas de votación, Petro obtenía un 40,39% de los votos, mientras Hernández lograba un 27,99%, según los cómputos de la Registraduría.

El candidato del izquierdista Pacto Histórico, un economista de 62 años que fue alcalde de Bogotá y perteneció a la exguerrilla del M-19, promete reducir la dependencia económica del petróleo y el carbón, recortar la brecha social con ideas que generan temor entre los empresarios, como la distribución equitativa de la tierra para aumentar la producción agrícola.

Hernández, un septuagenario empresario de la construcción y exalcalde de Bucaramanga, sorprendió y quedó segundo en la elección, superando al centroderechista Federico Gutiérrez, que aparecía detrás de Petro en las encuestas de intención de voto.

Rodolfo Hernández. Foto: Reuters

El empresario, que se presenta como candidato independiente, ganó reconocimiento por sus excéntricos vídeos en las redes sociales, en los que aparece cantando y montando en patineta eléctrica, así como por su fuerte discurso contra la corrupción.

Los partidarios del candidato presidencial colombiano de centroderecha Rodolfo Hernández del Partido de la Liga de Gobernantes Anticorrupción reaccionan después de que salió segundo en la primera ronda de las elecciones presidenciales en Cali, Colombia. Foto: REUTERS/Luisa González

Sin embargo, enfrenta una investigación por supuestamente haber intervenido como alcalde en la adjudicación de un contrato de manejo de basuras que buscaba beneficiar a una empresa y a uno de sus hijos, quien habría hecho lobby a favor de la compañía. El empresario, de 77 años, niega las acusaciones.

Con información de Reuters.