El banco de inversión Goldman Sachs decidió abrir de nuevo sus oficinas ante el descenso de casos de coronavirus en Estados Unidos, sin embargo la respuesta de sus empleados fue inesperada.
De acuerdo con Xataka, David Salomon, CEO de la empresa, no le terminó de convencer la modalidad de teletrabajo, calificándolo como una «aberración temporal», como consecuencia de la pandemia.
Pero sus empleados piensan de una forma distinta, ya que el día de la reapertura de las oficinas solo acudieron 5 mil de los más de 10 mil empleados de la compañía. Esto fue interpretado como una rebelión contra la obligación de volver al trabajo presencial.
La empresa explicó que a pesar de la poca asistencia el primer día en los siguientes días ha aumentado hasta alcanzar el 70 y el 80% de su edificio en Manhattan, Nueva York.
El CEO del banco estadounidense considera que una parte importante del éxito de la compañía es reunir en un mismo espacio a trabajadores altamente cualificados a los que colaborar bajo el mismo techo beneficia.
Y opina que dispersarlos, aunque funciona temporalmente, como han demostrado sus ganancias récord en 2021, acaba erosionando a los equipos y deteriorando lo que hace único a Goldman Sachs.
Cuando comenzó la pandemia Goldman Sachs envió al 98% de su plantilla en todo el mundo a teletrabajo, cuando los contagios comenzaron a bajar, continuó operando en forma híbrida, sin embargo parecer que endurecerán su política de presencialidad en el trabajo.