La conquista de los españoles trajo la fe cristiana católica al continente americano y los pueblos pidieron que se elaborara un Cristo, los religiosos tomaron la orden y contrataron los servicios del escultor Quirio Cataño.
El color característico de la imagen la hace única en su estilo, hay varios relatos orales del color oscuro que van desde el humo de las veladoras o de los materiales que se usaron para esculpirla.
Tras varias semanas de recorrido desde la ciudad de Santiago de los Caballeros hasta Chiquimula, el 9 de marzo de 1595 con gran algarabía llegó la imagen del Cristo Crucificado
Lo cierto es que han transcurrido 400 años y se mantiene la fe y la devoción de los feligreses.
