Entre las entidades afectadas por las sanciones económicas de Estados Unidos a Rusia, se encuentra el Fondo Ruso de Inversión Directa, RDIF, el cual financió el desarrollo de la vacuna contra el coronavirus, Sputnik V
La entidad criticó las sanciones que impuso el gobierno norteamericano y que alcanzaron sus actividades: “El RDIF nunca estuvo involucrado en ninguna actividad política… cumple plenamente con las leyes de los países donde realiza sus inversiones”, dijo el lunes.
El fondo no participó en ninguna comunicación con Ucrania y «sigue las mejores prácticas de inversión del mundo, que han sido reconocidas por todos sus socios internacionales, así como por los reguladores nacionales», agregó el fondo.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE. UU. sancionó al fondo, a su empresa administradora y a una de las subsidiarias de la empresa administradora en respuesta a la ofensiva militar de Rusia en Ucrania.
El RDIF, con sede en Moscú, que fue creado en 2011 por orden del expresidente ruso Dmitry Medvedev y el entonces primer ministro Vladimir Putin, opera en una serie de industrias.
Uno de los propósitos detrás de la creación de RDIF fue desarrollar relaciones con inversores internacionales para la inversión directa en Rusia. Tiene alrededor de $ 10 mil millones en activos bajo administración y $ 40 mil millones en compromisos de sus socios.
“Como resultado de tal competencia desleal, miles de millones de personas en todo el mundo pueden verse privadas del acceso a vacunas rusas efectivas y seguras”, dijo la entidad.