Maestros mexicanos en el sureño estado mexicano de Chiapas impidieron el viernes al presidente Andrés Manuel López Obrador ingresar a un lugar en la capital regional donde debía realizar su conferencia de prensa televisada diaria.
El presidente izquierdista se vio obligado a pronunciar sus declaraciones a través de una videollamada en su teléfono desde un automóvil en Tuxtla Gutiérrez, la capital de Chiapas, mientras de fondo se escuchaban inaudibles manifestantes gritando y hablando por megáfono.
Los maestros mexicanos a menudo hacen huelga, y López Obrador ha elogiado anteriormente a los poderosos sindicatos de la enseñanza que en el pasado han protestado, a veces violentamente, contra los gobiernos mexicanos de centro y de derecha.
Las últimas protestas estuvieron relacionadas con las reformas docentes más recientes, dijeron los periódicos mexicanos.
Desde que asumió el cargo en diciembre de 2018, López Obrador ha utilizado sus conferencias de prensa matutinas, que comienzan a las 7 a.m. y pueden durar más de dos horas, para establecer la agenda política y criticar a los críticos.
A media mañana, la mañanera, como se conoce coloquialmente a la conferencia de prensa matutina, era tendencia en Twitter en México.
La mayoría de las conferencias de prensa matutinas se llevan a cabo en la Ciudad de México, pero a veces las conduce mientras viaja por el país.
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«Ellos tienen derecho a protestar. Nosotros respetaremos eso», dijo López Obrador, en referencia a los maestros, su mensaje de video transmitido en una pantalla en el fondo de un atril vacío y la bandera mexicana.
«Me quedaré aquí el tiempo que sea necesario».
Con información de Reuters.