Las parejas pueden asegurar que al conocerse experimentaron amor a primera vista; sin embargo, la ciencia tiene una explicación para este sentimiento.
Cuando las personas empiezan a sentir mariposas en el estómago y notan todo de color de rosa al ver al ser amado, muchos consideran que si fue al primer encuentro se trata de amor a primera vista. ¿Aunque realmente esto existe?
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Aunque es clásico que las parejas de novios o incluso de esposos digan que se enamoraron sólo al verse cuando se encontraron por primera vez en la vida, un estudio científico afirma que este tipo de escenarios no existen en la vida real.
¿Qué tan real es el amor a primera vista?
El amor a primera vista no existe, sino que se trata de una “confabulación de la memoria construida por las parejas para mejorar su relación”, destaca el estudio “Qué clase de amor es el amor a primera vista. Una investigación empírica” liderado por el especialista en psicología Florian Zsok.
Para llegar a esta conclusión, los psicólogos desplegaron una plataforma en internet, similar a una página de citas, así como el análisis de algunos encuentros. Tras estudiar a 400 personas, de las cuales el 60% eran mujeres y la mayoría heterosexuales, llegaron a la explicación sobre que las personas dicen tener un “amor a primera vista” cuando ven atractivo a alguien más.
Zsok encontró un fenómeno el cual llamó “efecto halo”, en el cual los individuos brindan características positivas a las personas que les agradan, aunque no tengan información completa para llegar a esa decisión.
¿Cómo funciona el amor en el cerebro?
La explicación a este sentimiento de amor tiene una razón de ser desde el punto de vista científico. Alfonso Escobar, investigador emérito del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), reiteró que no existe el amor a primera vista y describió cómo funciona el cerebro ante esta sensación.
“Las estructuras cerebrales valoran lo que el ojo ve, lo que el oído escucha y lo que se toca. Esas sensaciones tienen un desempeño importante en los recuerdos y experiencias vividas anteriormente”, resaltó el académico.
Mientras que el amor a primera vista es sólo una respuesta ante el atractivo físico del ser amado. Esto el cerebro lo toma como una “respuesta de alarma” y elevan el ritmo cardíaco, las descargas de adrenalina, así como la dilatación de las pupilas.
Zsok encontró un fenómeno el cual llamó “efecto halo”, en el cual los individuos brindan características positivas a las personas que les agradan, aunque no tengan información completa para llegar a esa decisión.