Morataya se encuentra aún internada en el Hospital Roosevelt ya que se recupera de la agresión del perro que le causó heridas y hasta fracturas en brazos y piernas.
Desde dicho centro hospitalario habló del hecho y además aclaró algunas dudas sobre rumores que habían surgido.
«No estoy arrepentida por lo que pasó, tampoco estoy de acuerdo con que lo durmieran. Los animalitos no tienen la culpa, los perros no tienen la culpa de la clase de dueños que tienen», señaló entre lágrimas la rescatista. En un principio, rumores en redes sociales, indicaban que el perro sería sacrificado, sin embargo el animal se encuentra bajo resguardo de la Unidad de Protección Animal.
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Según Morataya, la información que ella tiene es que el perro fue abandonado por el piloto de un tráiler. Cuando ella acudió al llamado de los vecinos de que el perro estaba merodeando la zona, un niño se le acercó y el animal intentó atacarlo. Gina le arrojó una jaula y por esa reacción el perro la atacó a ella.
La mujer señaló que afortunadamente no perdió un dedo que prácticamente le quedó colgando, gracias a la atención que recibió en el hospital.
«Tontera es dejar que un perro ataque a un niño. Qué hubiera pasado si no le hubiera tirado esa cosa. El perro estaba muy agresivo», dijo Morataya, quien señaló también que seguirá adelante con su labor.
