Vista aérea de un área afectada por un deslizamiento de tierra, luego de inundaciones por fuertes lluvias, en Las Tejerias, estado Aragua, Venezuela, 9 de octubre de 2022. Foto: REUTERS/Leonardo Fernandez Viloria

Las autoridades de Venezuela dijeron que por lo menos 25 personas murieron y otras 52 estaban desaparecidas por la crecida de ríos, en lo que la vicepresidenta llamó una tragedia ocurrida en una región al suroeste de Caracas.

Debido a los aguaceros, aumentó el caudal de cinco quebradas o pequeños ríos en el poblado de Tejerías, en el estado Aragua, a unos 67 kilómetros al suroeste de la capital venezolana, dijo la vicepresidenta Delcy Rodríguez en declaraciones divulgadas por la televisora oficial.

Más tarde, el vicepresidente del área de Seguridad Ciudadana, Remigio Ceballos, dijo en la televisora estatal que pasadas las ocho de la noche la cifra de muertos era de 25, mientras que 52 personas seguían desaparecidas.

Las aguas arrastraron el sábado por la noche grandes troncos de árboles, raíces y material desde la montañas cercanas al poblado, dañando comercios y también cultivos de campesinos, agregó la funcionaria desde una empantanada calle de Tejerías.

No ofreció cifra de heridos y dijo que la prioridad de las autoridades era dar con los desaparecidos y tapiados bajo el lodo y rocas en distintos puntos del poblado. Agregó que miembros de los cuerpos de rescate y militares revisaban también las orillas de los ríos en busca de sobrevivientes.

«Hemos perdido niños, niñas, también. Todo muy lamentable (…) Es una tragedia lo que ha ocurrido en el casco central de Rejerías», dijo la vicepresidenta.

El mandatario Nicolás Maduro dijo en un mensaje en su cuenta de Twitter que decretó el área como zona de desastre y tres días de duelo.

Las calles de Tejerías, una localidad de unos 73.000 habitantes, estaban enlodadas y con restos de grandes rocas y troncos en las vías, casas tapiadas completa o parcialmente, según testigos de Reuters.

Armando Escalona, un conductor de taxi de 43 años, dijo que estaba con su familia en una iglesia evangélica, cuando los sorprendió la inundación. Agregó que logró abrazarlos y aguantar un poco, pero que algo lo golpeó en la cabeza, no sabe qué, y se desmayó. Cuando despertó dijo que no supo que pasó con su esposa y su hijo.

«Perdí a mi esposa y mi hijito de 5 añitos. No puedo ni hablar. Estábamos en el culto y todo pasó tan rápido, pasó y ya», dijo.

Gustavo Arévalo, un comerciante de 58 años que además es voluntario del cuerpo de Defensa Civil, dijo que el sábado cerca de las seis de tarde «empezó todo, en cuestión de unos minutos subió el nivel del agua».

«La antena telefónica (de la localidad) se vino para abajo. Llovió, pasó el agua, bajó, hizo el daño y ya. Como si hubiera habido un agua represada que la soltaron», agregó Arévalo en un sector del casco central Tejerías, una de las zonas más golpeadas.

Tras el paso del agua «empezamos ayudar a las personas (…) resguardar lo que quedaba de los negocios, eso parecía una licuadora dando vueltas en el agua» dijo, señalando que se encontraron todos los objetos de diferentes negocios juntos desparramados.

La vicepresidenta señaló que llovió el sábado en 8 horas el promedio de agua de un mes y que la crecida fue tan fuerte que arrastró las bombas sumergibles que alimentan el sistema de agua potable de Tejerías.

Indicó que las lluvias también han provocado daños, como derrumbes en avenidas y calles, en las últimas horas en otros tres estados del centro occidente del país, pero sin víctimas.

Las autoridades han alertado sobre los fuertes aguaceros de las últimas semanas debido al paso de ondas tropicales, que han dejado hasta hoy e incluyendo las víctimas de Tejerías 40 muertos.

Con información de Reuters.