España volverá a obligar a llevar mascarilla al aire libre como parte de un paquete de medidas destinadas a contener la variante del coronavirus ómicron, que se está extendiendo rápidamente, según dijo el miércoles a los dirigentes regionales el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Con casi el 80% de su población vacunada y un programa de refuerzo que va ganando terreno, España se ha librado en gran medida de la ola de infecciones que llevó a varios países del norte de Europa a endurecer los controles en otoño.
Sin embargo, la reciente llegada de ómicron ha disparado las cifras, con un récord de casi 50.000 nuevos contagios el martes, aunque los ingresos hospitalarios y los casos de cuidados intensivos siguen siendo bastante bajos en comparación con anteriores oleadas de COVID-19.
El uso de mascarillas en interiores ya era obligatorio en España y muchos españoles optan por cubrirse la cara también en exteriores, aunque la obligación legal de hacerlo se eliminó en junio.
Sánchez había convocado la reunión de los líderes regionales, responsables de su propia política sanitaria, para coordinar las medidas contra ómicron, que representó casi la mitad de todos los contagios de COVID-19 la semana pasada, frente al 3% de la semana anterior.
Su administración también propuso flexibilizar las normas sobre el tipo de kits de pruebas a domicilio que pueden vender las farmacias y destinar 292 millones de euros (331 millones de dólares) a reforzar el sobrecargado sector de la atención primaria, según informó el Gobierno en un comunicado.
Con información de Reuters.