Los reguladores estadounidenses autorizaron el martes otro refuerzo de COVID-19 para personas mayores de 50 años, un paso para ofrecer protección adicional a los más vulnerables.
La decisión de la Administración de Drogas y Alimentos abre una cuarta dosis de las vacunas Pfizer o Moderna a aquellas personas al menos cuatro meses después de su refuerzo anterior.
Hasta ahora, la FDA había aprobado la cuarta dosis solo para personas mayores de 12 años que tenían sistemas inmunitarios gravemente debilitados. La agencia dijo que este grupo especialmente frágil también puede recibir un refuerzo adicional, una quinta inyección.
La medida llega en un momento de gran incertidumbre. Los casos de COVID-19 se han reducido a niveles bajos después del aumento invernal de la variante ómicron súper contagiosa. Dos dosis de vacuna más un refuerzo aún brindan una fuerte protección contra enfermedades graves y la muerte, según muestran los datos de los CDC.
Pero una subvariante de ómicron está causando un aumento preocupante en las infecciones en Europa, y se está propagando en los EE. UU., incluso cuando la vacunación se ha estancado. Alrededor de dos tercios de los estadounidenses están completamente vacunados y la mitad de los elegibles para un primer refuerzo no lo han recibido.
Pfizer había pedido a la FDA que aprobara una cuarta inyección para personas de 65 años o más, mientras que Moderna solicitó otra dosis para todos los adultos «para brindar flexibilidad» al gobierno para decidir quién realmente necesita una.